jueves, 26 de febrero de 2009

De regreso a Mérida, Izamal y Chichen Itzá.

Ya de nuevo en Mérida nos quedamos unos días para trabajar un poquito y tomar fuerzas para seguir con el recorrido: Izamal y Chichen Itzá.

Nuestro parche, que sigue pequeño, pero en crecimiento!


Nuestros días en la quinta de Luis. Cocinando verduras asadas, sopas de frijoles, y algo de suero como dice Luis (cervecita fría). Al lado Pau con su panza. Abajo Luis en la ducha!!


De Mérida nos fuimos un poco tristes por la despedida pero animados por lo que queda por vivir y conocer. Así llegamos a Izamal una ciudad que fue muy importante para los mayas y ahora es una tranquila ciudad de arquitectura colonial, toda pintada de ocre. Allí hay un gran convento, construído sobre lo que era una pirámide. Allí estuvo un franciscano, Diego de Landa, que mandó quemar todos los escritos mayas...después no pudo con su conciencia y trató de reparar el daño escribiendo sobre lo que conocía de esa cultura. Un dulce.

Esta es la pirámide de base más grande de la península, de unos 180 metros de lado. Más grande que la de Chichén. En el pueblo hay otras cinco pirámides. Además de las que estaban abajo del convento y la alcaidía. Gaba en esta pirámide Kinich Kak Mo. Y Dani en otra desde donde se ve Kinick, todo esto en medio del pueblo.

Una vista del pueblo, y sus tranquilas calles, algo de la devoción a la virgen de Izamal y el convento, donde estuvo el Papa Juan Pablo II en su visita a México, es algo muy prensente en el lugar.

El convento. Y ya en Chichén viendo el juego de pelota, juego que se practicaba con una pelota de caucho entre dos grupos de 7 personas. Era una demostración de poder entre distintas comunidades, y era de tinte religioso. Al capitán del equipo ganador se los sacrificaba sancándole el corazón, por ser ganador se pensaba que tenía el favor de los dioses, entonces se trataba de ofrendarlo para el bienestar de pueblo (buenas cosechas, lluvia, etc.).

Uno de los frisos del juego de pelota, en esta cancha, si se le puede decir así, se repite seis o siete veces el sacrificio de un jugador.
Dani en la pirámide de Kukulcán, que es Quetzalcoatl para los toltecas, grupo que bajó del centro-norte de México hasta estas zonas y formó parte de la elite de Chichén Itzá, por eso sus construcciones y creencias tienen mucho de los toltecas. Kukulcán es la serpiente emplumada, el díos más importante y que por cómo está construída la pirámide se produce un efecto en el que baja por los escalones, como sombra, esto sucede en los equinoccios, como el de primavera que viene el 21 de marzo.

Este es el templo de los guerreros, todas las columnas del frente están talladas y arriba está el chaacmool que es esa figura de una persona acostadas, pero con las rodillas flexionadas y la cara mirando al costado. Al lado Gaba rengueando, se torció el pie en Izamal antes de venir a Chichén, ahí estamos cerca de uno de los dos cenotes que hay en Chichén, en los cuales se hacían sacrificios y donde se encontraron muchos objetos, varios de los cuales fueron "llevados" a EEUU por el explorador.

Acá estamos frente al observatorio. Y la imagen reproducida con luces de Kukulcán, en el show de luz y sonido que hacen a la noche en el sitio.

Ya de nuevo en Tulúm, nos encontramos con los chicos y nos fuimos atomar unos mates y ponernos al día. Ahí volvimos a ver a Pedro (en el sillón) después de no habernos encontrado en Cuba. De espaldas está el hermano de Flor. Y el resto de la banda bañandose después de haber ido a la Ruinas de Tulúm. Ya en la casa de las chicas, Dani y Vani practicando unos pasos de tango y Pao cocinando. Gaba, sacando la foto!!

No hay comentarios: